Recuerdo la noche en que prometimos estar siempre juntos. Tú me abrazabas y yo besaba tu mejilla. Eran los mejores días de nuestras vidas. No existía nada más que nuestro amor. Pero a veces las cosas cambian. El tiempo y la distancia se interponen. Un cambio repentino entre nosotros. Un "perdóname" y un último adiós.
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